La ONG británica Pesticide Action Network UK (PAN) ha puesto en descubierto un preocupante hecho en su reciente informe, "Alimentos para la Reflexión". Los resultados muestran la presencia de más de 120 residuos de pesticidas en frutas y verduras. Esta irreverencia no se encontró en cualquier lugar, sino que estos resultados provienen de alimentos consumidos por los niños de 4 a 6 años en las instituciones educativas.
Estos datos alarmantes fueron publicados por el Comité de Expertos en Residuos de Pesticidas en los Alimentos (PRIF, por sus siglas en inglés). El informe señala que los alimentos servidos en las escuelas como parte del "Programa de frutas y verduras en la escuela" del Ministerio de Salud británico, contienen niveles inaceptables de pesticidas.
Además de la diversidad, algunos de los 123 pesticidas encontrados están relacionados con serios problemas de salud, incluyendo el cáncer, el trastorno del desarrollo cognitivo y alteraciones del sistema hormonal.
Lo más inquietante es que un solo tipo de alimento puede contener diferentes tipos de pesticidas. El impacto conjunto de estos pesticidas, conocido como "efecto cóctel", no se ha estudiado completamente. No obstante, está claro que los niños son especialmente susceptibles a los pesticidas y se les expone a altas cantidades de forma constante.
. Los productos estudiados y la cantidad de residuos de pesticidas detectados en cada uno son los siguientes:
- Manzanas: 64
- Cítricos: 48
- Uvas pasas: 45
- Peras: 41
- Tomates: 27
- Fresas: 23
- Plátanos: 19
- Zanahorias: 12
- Guisantes: 11
Interesantemente, los niveles de residuos de pesticidas encontrados en estos alimentos son mucho más altos que los informados por el propio gobierno.
Según el informe, sólo un 30% de las frutas y verduras provienen de productores británicos. PAN está instigando al gobierno para que se produzcan más alimentos localmente, libres de pesticidas y de manera sostenible. La organización insiste en la necesidad de promover la agricultura orgánica en el Reino Unido para proteger, especialmente a los infantes, de los efectos adversos de los pesticidas.
De acuerdo con PAN, si se optara por cambiar a alimentos orgánicos en lugar de los convencionales, este cambio representaría solo un centavo de euro adicional por día para cada niño. De acuerdo con la ONG, proteger a los niños de la exposición diaria a un cóctel de pesticidas es invaluable.
Queda claro que exponer a los niños a una gran cantidad de pesticidas todos los días puede ser muy perjudicial, especialmente cuando la alternativa de consumir alimentos ecológicos está disponible.
En un tono introspectivo, uno no puede evitar reflexionar: ¿qué pasaría si se realizaran análisis similares en las escuelas de nuestras regiones?
