Si te sorprende saber que ese inocente pastel que acompañaste con un aromático café esta mañana, o ese nutritivo bocadillo con salami que almorzaste puede tener impactos negativos en tu cuerpo. Ingerir azúcares, grasas no saludables, demasiada sal, alcohol y hasta cafeína, puede desestructurar proteínas esenciales y deshidratarnos, en cuyos efectos nuestra piel es la primera en resentirse.
1. El efecto del azúcar en las proteínas y lípidos
El x azúcar es uno de los principales responsables del aumento de peso, formación de arrugas, falta de firmeza de la piel y problemas de salud en general. Comer demasiada azúcar dispara el mecanismo de glicación que ocurre cuando se ingere más azúcar de la que nuestro cuerpo puede procesar, ocasionando que la glucosa se una a las proteínas y lípidos. Este proceso daña el colágeno de la piel, responsable de la firmeza de la misma, y promueve la aparición de arrugas prematuras.
2. Las grasas trans y el flujo sanguíneo a la piel
Las grasas trans se hallan en los alimentos de consumo rápido, cualquier comida chatarra, entre otros. Aparte de aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón, estas grasas hacen que las arterias se endurezcan o se contraigan los vasos sanguíneos. Este suceso muestra su afectación en la piel a través de signos de envejecimiento prematuro y arrugas.
3. Acumulación de toxinas por el alcohol
Beber alcohol regularmente afectará tu hígado, el órgano encargado de expulsar las toxinas naturalmente a través de tu cuerpo. El estancamiento de toxinas en el hígado podría causar daños en la piel, como acné, pérdida de volumen y arrugas, enrojecimiento, deshidratación e hinchazón.
4. Consumo limitado de grasas saludables
Requerimos grasas saludables para mantener nuestra salud y la juventud y frescura de nuestra piel. Estas grasas reducen la inflamación, impulsan el crecimiento del cabello y construyen membranas celulares fuertes que mitigando la pérdida de agua en las células de la piel. Algunas de las mejores fuentes de grasas saludables son: salmón, semillas de chía, aguacates, almendras, germen de trigo, todas las nueces y semillas, verduras de hoja verde oscura, huevos enriquecidos con omega-3 y aceite de coco.
5. Retención de líquidos por la sal
Los alimentos como el queso, pizzas, papas fritas y cereales contienen sal en exceso, la cual causa que el cuerpo retenga agua y dé un aspecto hinchado a la piel, además de provocar deshidratación.
6. Carnes procesadas o embutidos y la deshidratación
Los embutidos como las salchichas, el tocino y las carnes frías pueden causar deshidratación e inflamación debido a su alto contenido de sal y conservantes. Además, estos productos reducen la vitamina C en el cuerpo, vital para la formación de colágeno.
7. Daño en la piel por la carne carbonizada
El carbón negro en la carne puede contener hidrocarburos proinflamatorios que pueden dañar elementos esenciales para tu piel como el colágeno, lo que generará una apariencia envejecida.
8. Papas fritas y la pérdida de minerales esenciales
Las papas se descomponen en azúcares al momento de entrar a nuestro cuerpo. Los alimentos fritos en aceite a altas temperaturas liberan radicales libres que dañan las células de la piel.
9. Café y bebidas con cafeína y la sequedad de la piel
La cafeína es un diurético, lo que hace que excretemos líquido, y por ende, provoca falta de humedad en nuestro cuerpo y deja nuestra piel seca y frágil.
10. Comidas picantes: enrojecimiento e hinchazón
Los alimentos picantes pueden causar rosácea en tu piel ya que hacen que tus vasos sanguíneos se dilaten, resultando en una piel enrojecida y menos juvenil.
Productos para mantener tu piel joven
Por último, te presentamos una lista de productos que te ayudarán a mantener tu piel fresca y juvenil:
Mantener una dieta sana puede ser un desafío. ¿Encontraste algunos de tus productos favoritos en nuestra lista? ¿Podrías reducir fácilmente tu consumo de azúcar y sal? ¡Comparte tus opiniones con nosotros en la sección de comentarios!
