El Fascinante Higo: Belleza Natural y Nutrición

El higo es un maravilloso fruto que irradia la belleza de una flor. Caracterizado por su piel lisa como la seda y su interior que recuerda al caramelo y está lleno de diminutas semillas crocantes, este fruto ofrece una textura íntimamente deliciosa. Los higos, también conocidos como la "fruta prohibida", son un verdadero regalo de la naturaleza que pueden convertirse en el elemento estrella de cualquier comida. No es sorprendente que los higos recién cosechados sean tan populares durante su temporada.

Ricos y energéticos higos

Existen cientos de tipos de higos. Todos ellos son extremadamente nutritivos, energéticos y en la mayoría de los casos, increíblemente dulces. De hecho, antes de que el azúcar se popularizara, los higos se utilizaban para darle un toque dulce a los postres.

Los higos frescos están disponibles durante su temporada, pero también puedes encontrar higos deshidratados en cualquier época del año. Las higueras suelen tener una cosecha muy generosa, por lo que deshidratarlos es una gran manera de preservarlos, especialmente durante la temporada de cosecha cuando el sol está en su punto más fuerte para llevar a cabo este procedimiento.

La mejor manera de disfrutar de los higos es comiéndolos en su estado natural, incluso con la piel incluida. Si tienes la oportunidad de cosecharlos tú mismo y disfrutarlos bajo la sombra de la higuera, su sabor será aún más delicioso, especialmente si los comes frescos en días de calor intenso.

Cuidado, si decides cosechar tus propios higos, recuerda que al manipular las hojas puede que sufras una leve irritación. Por eso, es aconsejable recoger las hojas con cautela o utilizar guantes. También puedes recolectar las hojas, lavarlas bien y luego secarlas para preparar infusiones y otros usos.

4 Recetas originales con higos que debes probar

El fascinante mundo de la cocina 'raw' ofrece muchas formas creativas de disfrutar de los higos. Aquí te presentamos algunas ideas para que aproveches al máximo este delicioso y venerado fruto de la naturaleza:

1. Intégralos en tus platos: Ya sea partidos a la mitad, en cuartos o en rodajas, los higos son una adición deliciosa para ensaladas, brochetas, canapés o platos parecidos. Para un sabor más contrastante, puedes combinarlos con alcaparras, aceitunas, cebolla, ajo, etc. También van muy bien con hojas verdes y brotes.
2. Combínalos con quesos vegetarianos: El queso de almendra o de anacardo son una excelente combinación agridulce con los higos.
3. Crea tu propia mermelada: Simplemente aplasta los higos con tus manos, incluso con la piel. ¡Es una actividad muy relajante y terapéutica! Conseguirás una textura similar a la mermelada, perfecta para untar en pan tostado, crear salsas o como relleno de tartas. Puedes intentar preparar mi receta del delicioso Pastel Crudito Inolvidable de Higo.
4. Deshidratados: Si prefieres, puedes comprarlos ya deshidratados o hacerlo tú mismo: simplemente córtalos antes para que se sequen más rápido. En esta forma puedes crear maravillas culinarias: dulces de chocolates, galletas, barras energéticas... O como un sabroso ingrediente en galletas deshidratadas. Sabrán deliciosas si las combinas con cebolla, orégano y algunas semillas como lino y pipas de girasol.