La eterna búsqueda de la felicidad puede llevar a algunos individuos a explorar caminos poco convencionales como la sologamia. Este extravagante concepto, mucho más allá de la monogamia, la poligamia y otras formas de formas alternativas de relaciones, cada vez gana más adepto.
Descifrando la Sologamia
La sologamia es un acto de compromiso personal, una ceremonia en la que uno se casa consigo mismo. Va más allá de las implicaciones de narcisismo que podrían surgir de tal acto. En cambio, los promotores de la sologamia argumentan que este compromiso personal puede llevarnos hacia una vida más feliz, reforzando la autoestima y el amor propio.
El matrimonio autocomplaciente no necesariamente requiere de una ceremonia. Para algunos, puede ser suficiente un momento de reflexión personal y decisión privada. Para otros, puede implicar toda la algarabía de una boda tradicional con vestido, pastel y recepción.
Origen de la Sologamia
Los primeros informes de la sologamia datan de diciembre de 1993 en Estados Unidos. Linda Baker, quién cumplía 40 años, decidió casarse consigo misma. Ella decidió comprometerse a sí misma ante la presencia de 7 damas de honor y 75 amigos y familiares.
"Se trata de hacer las cosas por uno mismo y no esperar a que alguien más lo haga realidad" – Linda Baker
En 2017, la italiana Laura Mesi atrajo la atención de los medios al celebrar una lujosa boda consigo misma, que incluyó 70 invitados, un pastel y un vestido de novia.
Sologamia en la Cultura Popular
La sologamia también ha encontrado un lugar en la cultura popular. En un episodio de la serie "Sex and the City", el personaje de Sarah Jessica Parker, Carrie Bradshaw, decidió casarse consigo misma en celebración de su elección de permanecer soltera y sin hijos. La serie "Glee" también dedicó un episodio a la sologamia.
Esta tendencia ha cobrado fuerza en países como Reino Unido, Australia, Canadá, Países Bajos, Taiwán y Estados Unidos. Aunque no se reconoce como un acto legal en muchos de estos países, para muchos, se ha convertido en un símbolo de autoafirmación y amor propio.
La sologamia va más allá de ser una moda pasajera. Representa una celebración del amor propio y la independencia. Desafía la narrativa común de que necesitamos una pareja para ser felices, proclamando que ya somos suficientes tal como somos. ¿Y por qué no? ¡Si te amas a ti mismo, celebra ese amor con orgullo!
