Si aún no sabes los múltiples beneficios que las almendras ofrecen para tu salud, este artículo es para ti.
¿Qué son exactamente las almendras?
Las almendras son las semillas adquiridas del fruto del almendro, o Prunus dulcis, un árbol de hojas caducas que florece temprano y se cultiva comúnmente en zonas mediterráneas y en Asia Occidental.
Está clasificado dentro del grupo de los Frutos Secos, al igual que las nueces, los pistachos, las avellanas o los anacardos.
La flor del almendro, de color blanco, es una de las primeras en florecer al inicio de la primavera. Esta flor produce la semilla que transformamos en fruto seco para su consumo y para disfrutar de sus numerosas propiedades.
Las almendras se encuentran en el interior del fruto del almendro, protegidas por una cáscara dura de color marrón. Al retirar esta cáscara y una pequeña capa similar a una segunda piel de color marrón oscuro, que también es comúnmente retirada, estamos listos para consumirlas.
Visualmente, este fruto seco es reconocible por su forma ovalada y su textura dura, siendo más alargado que ancho y de color blanco.
¿Cuál es el valor nutricional de las almendras?
Las almendras son un poderoso concentrado de nutrientes. Aunque muchas personas saben que son saludables, no todos conocen su contenido nutricional específico.
Por cada 100 gramos, las almendras contienen 49 gramos de grasas, 22 gramos de carbohidratos (incluyendo 12 gramos de fibra dietética) y 21 gramos de proteínas vegetales.
Son ricas en vitaminas como la colina, vitamina E, B3, B2, Vitamina A, B5, Betaina, B1 y B6, y minerales como el potasio, fósforo, magnesio, calcio, hierro, zinc, selenio, manganeso, cobre y sodio.
Además, las almendras aportan unas 575 calorías por cada 100 gramos.
¿Por qué son beneficiosas las almendras? Las propiedades de estos frutos secos
Las almendras son excepcionales en su composición nutricional. Contienen grasas saludables a través de ácidos grasos esenciales, grasa insaturada, proteínas e hidratos de carbono, además de potasio, fósforo, magnesio y calcio. También son ricas en folatos (parte del grupo B de vitaminas), vitamina E y niacina (B3), otro componente del grupo de vitaminas B.
Estos elementos pueden ayudarnos a mantener equilibrados nuestros niveles de minerales y vitaminas. Estos son algunos de los beneficios de su consumo:
- Protección del sistema cardiovascular: Ayudan a mantener los niveles adecuados de colesterol bueno y facilitan la eliminación del colesterol malo gracias a sus ácidos grasos esenciales.
- Fuente de energía: Su alto contenido en carbohidratos proporciona una fuente de energía rápida y de fácil absorción.
- Potencial antioxidante y regenerador: Ayudan en la regeneración de los tejidos celulares y mantienen la piel y los órganos en buen estado, además la Vitamina B2 ayuda a mantener la vista y la piel en buen estado.
Ahora que conoces todos estos beneficios, ¿no te parece que es hora de incorporar las almendras en tu dieta?
