El deterioro cognitivo a medida que envejecemos es algo asumido, pero los procesos que lo desencadenan aún son enigmáticos. Sin embargo, recientes hallazgos sugieren que dos proteínas presentes en la sangre de los jóvenes podrían jugar un papel vital en detener este deterioro cognitivo.
Las investigaciones han revelado que la sangre de ratones jóvenes puede revertir las deficiencias cognitivas que suelen aparecer con la edad en ratones mayores, provocando un aumento en la sinapsis cerebral.
Notablemente, este hallazgo ha demostrado ser cierto también en las neuronas humanas. Descubrir cuáles son los componentes favorecedores contenidos en la sangre joven es la gran incógnita. Dos proteínas, THBS4 y SPARCL1, podrían ser los potenciales candidatos.
Estudios sugieren que la sangre joven puede mejorar la sinapsis neuronal
Un estudio reciente realizado por la Universidad de Stanford examinó el suero sanguíneo de ratones jóvenes (de solo 2 semanas de vida) y viejos (de 12 a 15 meses) para detectar cualquier diferencia relevante.
"La investigación ha evidenciado que la introducción de sangre de ratones jóvenes en ratones viejos mejora las habilidades cognitivas y aumenta la sinapsis, lo que apunta a la existencia de ciertos componentes en la sangre joven que favorecen la función cognitiva".
La sangre joven estimuló una proliferación en las estructuras vitales para la comunicación de las células y aumentó la sinapsis. No se observaron cambios similares con la sangre de ratones mayores.
En la sangre de los ratones jóvenes se hallaron las proteínas THBS4 y SPARCL1, ambas vitales para el desarrollo y la organización de las células del cuerpo. Cuando estas proteínas se aplicaron a las neuronas humanas, la actividad sináptica mejoró dramáticamente.
"El tratamiento de las neuronas humanas con THBS4 recombinante o SPARCL1 mejoró dramáticamente la formación y actividad de la sinapsis. Nuestros resultados apuntan a que THBS4 y SPARCL1, presentes en la sangre joven, pueden ser factores sistemáticos que activan directamente la formación y función de sinapsis en las neuronas".
Los investigadores opinan que las proteínas THBS4 y SPARCL1 podrían ser los responsables de las propiedades rejuvenecedoras de la sangre joven y podrían usarse para la generación de neuronas robustas a partir de células madre humanas. Además, estas proteínas podrían utilizarse como potenciales tratamientos para enfermedades neurodegenerativas.
¿Podría la clave para combatir el deterioro cognitivo estar en la sangre de los jóvenes? Solo el tiempo y una mayor investigación lo dirán.
