El ajo, es reconocido mundialmente como uno de los ingredientes más utilizados en la cocina. Este pequeño bulbo aporta sabor y aroma a los platos, pero además posee numerosas propiedades medicinales.
Desde épocas ancestrales, se ha empleado el ajo para tratar una multitud de enfermedades y dolencias. Hoy te mostramos cómo puedes aprovechar sus beneficios, consumiéndolo de forma asada. ¿Sabías qué pasa en tu cuerpo 24 horas después de consumir 6 dientes de ajo asado?
En la primera hora de haberlo ingerido, el ajo se transforma en nutrientes que se distribuyen por nuestro organismo.
De las 2 a las 4 horas, el cuerpo comienza a recibir los antioxidantes del ajo, que actúan contra los radicales libres y combaten células cancerígenas presentes en el cuerpo. ¿Increíble, verdad?
En las siguientes dos horas (4-6 horas), el metabolismo se regula y activa el proceso para eliminar excesos de líquidos y quemar la grasa acumulada. ¡Algo a tomar en cuenta si buscas perder peso!
De las 6 a las 7 horas, se puede sentir el efecto antibacteriano del ajo, que recorre el torrente sanguíneo combatiendo a las bacterias.
De las 6 a las 10 horas, los nutrientes aportados por el ajo han tenido un impacto a nivel celular, protegiendo contra la oxidación.
Transcurridas las últimas 24 horas, en tu cuerpo inicia un proceso de depuración profunda, incluyendo la regulación del colesterol.
¿Por qué se recomienda consumir ajo al menos una vez al día?
El ajo alivia la fatiga gracias a su alto contenido nutritivo.
Potencia la capacidad atlética.
Contribuye a la longevidad de las células.
Disminuye la presión sanguínea, mejorando la hipertensión.
Potencia las defensas naturales del cuerpo. El ajo ayuda a suprimir los metales pesados de tu cuerpo.
¿Cómo asar ajo para su consumo?
Coloca un bulbo de ajo (una cabeza completa) en el horno, cubierto con papel de aluminio, durante 15 a 20 minutos o hasta que esté tierno. Saca del horno y deja enfriar. Puedes consumir sólo 6 de estos dientes de ajo asado. Recuerda mantener una alta ingesta de agua y consumir vegetales frescos de fácil digestión. Evita comidas procesadas o envasadas. Te recomendamos mantenerte en casa durante estas 24 horas, ya que posiblemente desprendas olor a ajo.
