El fallecimiento es una certeza para todos los seres humanos. Sin embargo, las circunstancias que rodean la muerte pueden ser impredecibles y en ocasiones, hasta increíbles. A continuación, descubre la lista de los diez fallecimientos más desconcertantes y embarazosos de la historia.
1. El última paja en Pompeya
Fue en el 79 d.C, cuando el Monte Vesubio arrasó la ciudad de Pompeya, enterrando a cerca de 16.000 desdichados bajo escombros y cenizas. Entre ellos, uno ha generado bastantes risas a través de internet, dado que pareciera que la erupción lo alcanzó en plena sesión de autoplacer. Aunque es más probable que esto sea un mito, es un testimonio interesante de cómo los vestigios arqueológicos pueden inspirar historias insólitas.
2. La demostración de un abogado termina en horror
En un intento por impresionar a unos estudiantes en Toronto, un abogado quiso mostrar la resistencia de su ventana ubicada en un rascacielos. Se lanzó contra ella confiando en su resistencia, pero ésta cedió, resultando en su caída desde el vigésimo cuarto piso y su muerte inmediata. El hecho pone en relieve la importancia de la humildad y de no desafiar las leyes naturales.
3. Federico I Barbarroja, un fin inesperado
Federico I Barbarroja, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, se distingue por su notable muerte. En una cruzada a Tierra Santa en 1190, agotado por la sed y el calor, decidió zambullirse a un río con su armadura puesta. Lamentablemente, se hundió y murió ahogado. Una muestra de cómo hasta los más poderosos pueden ser víctima de la imprudencia.
4. Fatalidad barbuda
Hans Steininger del siglo XVI, destacaba por tener la barba más larga del mundo, llegando a casi metro y medio de longitud. Sin embargo, durante un incendio en su pueblo natal de Braunau am Inn, Austria, en 1567, se tropezó con su propia barba y se quebró el cuello. Un recordatorio de que incluso lo que nos hace únicos puede volverse mortal.
5. Adicción mortal
En 2005, el surcoreano joven Lee Seung Seop murió jugando Starcraft y World of Warcraft en un cibercafé durante más de 50 horas consecutivas sin comer ni descansar. Murío de agotamiento. Un testimonio de los peligros de los excesos, incluso en el entretenimiento.
6. Experimento con consecuencias fatales
El filósofo y científico inglés del siglo XVI, Francis Bacon, murió mientras intentaba probar su nueva teoría de que la nieve podría ser utilizada para preservar la carne, en 1626. Atrajo una neumonía al estar demasiado tiempo fuera en la nieve y falleció. Esto demuestra que incluso los más brillantes no están exentos de malas decisiones.
7. Primer muerto a manos de un robot
Robert Williams es la primera persona registrada que muere a causa de un robot industrial en 1979, cuando trabajaba en una planta de Ford en Michigan. Subió para recoger piezas del estante luego de que un robot estropeó el sistema, pero el robot volvió a encenderse inesperadamente golpeándolo hasta la muerte. Un oscuro precedente en la historia industrial.
8. La bufanda fatal
Isadora Duncan, la famosa bailarina, murió en un accidente peculiar en 1927. Montó en un coche descapotable en Niza, Francia, cuando su bufanda se enredó en la rueda trasera del vehículo, provocando su asfixia y muerte. Un recordatorio de cómo incluso lo más cotidiano puede ser potencialmente peligroso.
9. El guitarrista electrificado
Leslie Harvey, un talentoso guitarrista escocés conocido por su trabajo en la banda Stone the Crows, murió en medio de un concierto el 3 de mayo de 1972 en Swansea cuando tocó un micrófono con las manos mojadas y recibió una descarga mortal. Un claro ejemplo de los peligros que surgen cuando no se toman las debidas precauciones.
10. El truco mortal de un mago
En Halloween de 1992, el mago americano Joseph W. Burrus intentó realizar un truco donde se enterraría a sí mismo en una caja llena de concreto húmedo, pero la caja no resistió y colapsó sobre él, provocando su muerte. Un recordatorio de los riesgos de los números peligrosos sin las medidas de seguridad adecuadas.
Estos relatos nos recuerdan que la vida puede ser imprecisa y a veces muy extraña. Pueden ser trágicos, pero nos ofrecen una visión única sobre las ironías y caprichos del destino humano.
Fuentes: muyinteresante, esquire
